Este tipo mecanismo de impresión está basado en un depósito de 'tinta seca' llamado tóner. En este caso un láser se encarga de calentar el toner y fijarlo en el papel. Esta técnica ofrece una mayor calidad, rapidez y limpieza, eso si, a un precio algo más elevado. Sin embargo la evolución de los precios en los últimos años ha provocado que la diferencia de coste no sea tan elevada y se puede considerar el uso de una impresora láser en el hogar o en una oficina pequeña.
Todos los fabricantes de impresoras ofrecen modelos láser a precios bastante competitivos cuyas características de impresión superan notablemente a las de tinta. La resolución que determina la calidad se mide en puntos por pulgada situándose entre 600 y 1.200 ppp, y permiten imprimir más de 50.000 páginas mensuales.
Las impresoras monocromo de láser ofrecen un coste óptimo por página si utilizamos cartuchos compatibles o incluso más económico si usamos kits de recarga